sábado, 4 de agosto de 2012

Augusto

Era frágil, lo recuerdo esos domingos por la mañana con la mirada perdida. Una mirada que buscaba algo más allá, pero que no podía desencadenarse del acá.

Cada vez que se acercaban fechas especiales algo cambiaba en su ser. Desde hace un tiempo no recuerdo no verlo llorar en navidad o año nuevo. Desde hace tiempo algo cambió en su interior. 

Unos dicen que se defiende ¿de qué? no sé, tal vez el enojo le hace inhibir su realidad. Yo creo más bien que grita por los poros ¡Auxilio!, que grita sin cesar para atraer alguna mirada que de una vez por todas le abrace y le haga sentir que aún hay esperanzas.

Parece tenerlo incorporado a su calendario. No queda más que prepararnos y marcar los días por adelantado. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario