jueves, 1 de septiembre de 2011

Brisas

Supongamos que me encuentro boca arriba, viendo la extraña gravedad de los árboles, escuchando los sonetos de los quisquillosos pájaros y disfrutando de un no tan habitual sol veraniego en invierno.
¿Por qué estoy en ese lugar? ¿Por qué estas personas están a mi alrededor? No es una mera casualidad amigos, se que existe una misteriosa fuerza que nos atrae y aunque nos digan que nosotros no elegimos conocer a las personas, aunque nos digan que somos una selección al azar que se juntó por coincidencia, yo se que no es así, es más! no lo se, lo siento! Debemos aprender y entregar con estos seres, debemos llorar y reír, y no porque así lo dicen los antiguos profetas, sino porque así lo designa nuestro desarrollo. "Todo sucede por algo" un gran cliché ¡pero por la pachamama que es cierto! somos una simple brisa que va en diferentes direcciones atravesando tormentas y volando cometas, nuestra misión es crecer aprendiendo ese algo de quien está al lado, aprendiendo a tolerar, a comprender, o a ir descubriendo que quizás tu ideal no es así o asá, vamos a la misma vez sembrando y dando de nosotros para que esa persona inconscientemente también aprenda o se complemente del día a día.
Podrás un 15 de Noviembre cualquiera llorar porque estás lejos, porque te has sentido solo e incomprendido, porque no ha sido fácil o porque te quemaste con la estufa. Pero podrás reír de tus experiencias, esas que quizás te hicieron crecer de golpe o atorarte con un ataque de ñoñez, ni hablar de cuando te diste cuenta de lo valioso que era tu familia y un simple gracias, cuando pudiste decir te quiero sin trabas, cuando tuviste el valor de pedir perdón y cuando aguantaste el sueño para dar una mirada de apoyo. Creo que se capta la idea, pero quizás no siempre la valoramos y es normal sabes? es la única forma de que te vengan estos taldos sentimentales y reflexiones, una y otra vez.
No se como sería mi vida sin toparme con todos estos seudo hermanos con los que muchas veces soy fría, pero que en el fondo son mi tesoro. Con cada ser extraño, malvado, tierno, callado, egoísta, servidor (en fin) que me he topado, sí, con cada uno que me ha moldeado como la brisa a un pequeño tallo que busca llegar alto, incluso esa humilde abuelita que vi hoy mirando el atardecer lo ha hecho. Agradecida hasta el fin, y aunque muchas veces no las vuelva a ver, ya están en mi en cada sonrisa, pensamiento y acción. Los llevaré por siempre y aunque no me crean lo haré no importa el grado  o sentido positivo y negativo.
Y me alargo, en un texto muy explícito (y feito), sin el extremado sentimentalismo que me caracteriza, pero es que es así de simple todo esto! muy bonito la verdad y ahora me encuentro boca abajo, aplastada por unas locas que sembraron en mi.

No hay comentarios:

Publicar un comentario